El tema del que voy a escribir, es muy peliagudo y por lo tanto hay que
exponerlo con mucha delicadeza y tratarlo con pinzas, para que nadie
relacionado con la Fiesta, se sienta aludido, ni ofendido, nada más lejos de mi
intención.
Estos días pasados surgió la polémica, en el mundo festero, una mujer
alcoyana, Hermia Blanquer, pretendía desfilar
codo a codo, con los hombres, en la Fila Navarros, de la localidad de Alcoy, en
sus próximas Fiestas de San Jorge y al final no va a poder ser, por votación
popular dentro de la propia Fila.
Bueno pues me voy a atrever a dar mi humilde opinión, en esta columna
como festero. Primero en mi pueblo,
hace ya unos cuantos años surgió, como es natural, que la mujer villenera, pretendía
participar como un festero más en nuestras Fiestas y no solo como Madrina de
nuestras Comparsas, sino como socios activos y con todos los derechos que caracterizaba
a los varones.
Después de varios años de lucha y reivindicación por parte de la mujer
villenera, con reuniones constantes y fueros de dialogo en las Propias
Comparsas y posteriormente en la Junta Central de Fiestas, se aprobó casi por
unanimidad que la mujer participaría en la Fiesta, como un festero más,
vistiendo los colores, cada una, de la Comparsa que eligiera, ahora eso sí,
diseñando un nuevo traje, especial para las feminas, de tal forma, que a la
hora de desfilar, en la Entrada, en la Cabalgata y en cualquier acto oficial de
la Fiesta, las mujeres tuvieran su propia identidad, su propio encanto, e idiosincrasia,
dentro de la Comparsa, desfilando, las mujeres y los hombres, todos juntos,
pero no en escuadras mixtas, ya que, en consenso hombres y mujeres, sé penso
que podría romper, la tradición ancestral de la Fiesta y esa fue la formula mágica,
acercada o no, pero que después de unos años, nos ha demostrado, que la Fiesta
se ha duplicado en numero de participantes, llegando a desfilar por nuestras
calles en las pasadas Fiestas Septiembrinas hasta 11.000 personas.
Por lo tanto, aunque hay muchos pueblos en la provincia de Alicante,
que son muy reacios a que la mujer
participe en las Fiestas de Moros y Cristianos, porque creen, que esta
contribución, podría esta frontalmente reñida, con la tradición más ortodoxa de
nuestras Fiestas, pues no es así y a las pruebas me remito en pueblos tradicionalmente
festeros y con una solera demostrada, como por ejemplo Villena, Caudete, San
Vicente del Raspeig, pudiendo enumerar muchos más, en los cuales no solo la
Fiesta no ha decaído, sino que se ha hecho mucho más grande y popular, para
residentes y foráneos.
Por lo tanto SI, CON MAYUSCULAS a la participación activa de las MUJERES, en nuestras
Fiesta de Moros y Cristianos.
Publicado en las Provincias
17/04/2002