EL
REGRESO A LAS AULAS
Una vez terminado el período
estival, llega el mes menos deseado por padres e hijos, se inicia de nuevo el ciclo escolar y
con él, la monotonía del día a día, el odioso despertador
que suena de nuevo, la vuelta al trabajo, a la obligación, al deber
diario y al colegió, que es lo mismo para los más pequeños
de la casa.
Los padres o tutores, deben tener
dispuestas las previsiones económicas, pues el desembolso para la compra
de libros, material escolar, uniformes, carteras, mochilas y todo tipo de
accesorios académicos, van a provocar que los bolsillos de los
progenitores, queden bastante tocados.
El importe que se va a desembolsar
aproximadamente, para todos estos menesteres, por cada niño, puede
ascender de
Por lo tanto para los padres este
mes de septiembre, es peor que la temida cuesta de enero, pues después
de haberse gastado la paga extraordinaria de Junio, en las vacaciones y sin dar
tiempo ha reponerse, hay que volver a dejar casi vacías, las arcas familiares.
Pero no hay problema, para eso se
crearon las becas de ayuda para libros, son tantos los requisitos que se
exigen, que las personas que las pueden pedir, se asustan de tantos datos que
hay que rellenar y documentos que aportar, que renuncian a solicitarlas y
además con la referencia exigible de ingresos máximos percibidos
en la unidad familiar o renta, es casi imposible, que con los importes
referenciados por la administración, una familia pueda vivir
dignamente.¿Cómo van a poder pagar, esas cantidades desorbitadas
en libros de texto, material escolar y accesorios varios?.
En algunos países de
PUBLICADO EN LAS PROVINCIAS
14/09/2003