En la populosa barriada de Benalúa, entre Alipark y Francisco Albert,
se encuentra situado el acuartelamiento militar que en otro tiempo fue la sede
del regimiento de infantería San Fernando nº11, del cual muchos alicantinos conservan
recuerdos inolvidables de su paso por estas instalaciones castrenses. Hace unos
años el Ministerio de Defensa las cedió al Ayuntamiento de nuestra población,
para acometer diversas obras de vital importancia.
El Cuartel constaba
de un recinto totalmente vallado con varios edificios donde los militares
ejercían su actividad, los orígenes del regimiento se remontan a la guerra de
la independencia española concretamente al día 5 de Mayo de 1808 en el que Francisco de Rovira, organizo la
sublevación contra las tropas de Napoleón Bonaparte en la zona del Ampurdan y
con varias unidades formó el denominado Tercio del Ampurdan nº1 siendo su
primer jefe Manuel de Montesinos, este
regimiento tiene una historia muy extensa desde su creación, cambiando varias
veces de nombre, Tercio de la Primera Legión de Infantería, Regimiento de San
Fernando de Infantería de Línea (1811), San Fernando nº57 (1815), Regimiento 10
de Cataluña (1825) y así hasta llegar al año 1943 que tomo el nombre actual de
Regimiento de Infantería San Fernando nº11 pasando de guarnición a Ifni y desde 1960 fijo su permanencia en Alicante,
hasta que en el año 1985 se disolvió definitivamente.
En estas instalaciones han realizado su servicio militar
muchos alicantinos y personas venidas de toda, la geografía nacional, al
demoler estos edificios desaparecen con ellos parte de la historia de nuestra
ciudad, esas piedras rotas, tienen su propio significado y mucho que decir,
recuerdos, vivencias, horas de trabajo, alegrías, tristezas, honor, satisfacción
del deber cumplido, disciplina, servicio, entrega y tantas cosas buenas y
malas, tiempos de dictadura y represión, de democracia y libertad, de cambio y
esperanza.
Dicho enclave
militar originó en este barrio, que florecieran pequeños negocios familiares,
bares, restaurantes, panaderías, generando muchos puestos de trabajo.
Este recinto dejara para siempre de existir una vez se
ejecute el derribo del único edificio que todavía queda en pie, el más
emblemático, el que poseía la parte más noble, el patio de armas, las oficinas
generales y los despachos de oficiales, etc.
Alicante es una población muy dinámica que día a día, va
modernizando sus infraestructuras urbanísticas. El tiempo ha pasado y el
Cuartel de Benalúa ha cumplido con creces sus objetivos y ahora debe dar paso
al progreso con esas nuevas infraestructuras que se van a acometer en breve.
PUBLICADO EN LAS PROVINCIAS 14/12/2002