DEJAR LA VIDA EN EL ASFALTO

 

 

 

Los medios de comunicación, están difundiendo todos los días noticias, de personas que se dejan la vida en las carreteras españolas, en accidentes de circulación, las cifras de mortalidad que baraja la DGT, son verdaderamente escalofriantes y sobre todo muy  preocupantes.

 

Cómo analizar lo que esta ocurriendo actualmente en las carreteras, autovías y autopistas de nuestro país, habría que realizar un amplio cuestionario de preguntas, a las personas que conducen un vehículo a motor diariamente.

 

 ¿Las infraestructuras viarias son tan buenas, que invitan al usuario a circular a mayor velocidad?.¿Los vehículos que se fabrican en la actualidad están súper potenciados?.¿Los conductores cuando cogen el volante se transforman, aflorando el estrés que llevan dentro y no razonando las maniobras que tienen que ejecutar?¿Cuándo se coge el coche se tiene en cuenta, que no se debe beber alcohol?.

 

 

Hay multitud de preguntas que desarrollar, para llegar aun resultado y análisis correcto, de lo que esta ocurriendo, en la sociedad de nuestros días, en esta materia.

 

Lo que es una realidad, que las cifras de muertos, parapléjicos o heridos de todo tipo, están engrosando las estadísticas siniestrales, ocurriendo a diario, accidentes de trafico, en la carretera, calles, avenidas y plazas de las ciudades.

 

Las entidades aseguradoras el pasado 1 de abril, modificaron la cobertura del seguro de responsabilidad civil voluntario de automóviles, de poseer unas garantías ilimitadas, pasaron a reducirlas a un máximo de 50 millones de euros por siniestro, sin modificar las primas que se pagaban, pero me temo, que si siguen aumentando las estadísticas siniestra les, de esta forma tan alarmante, pronto se verán obligadas a subir los precios o primas, en el ramo de automóviles, porque de otra forma será imposible mantener el margen de beneficio técnico, de estas empresas.

 

Este tema con independencia, de las indemnizaciones que se paguen por los accidentes de este tipo, es muy preocupante para el ciudadano de a pie, sé esta creando una psicosis muy fuerte, para las personas que no siendo profesionales en la conducción, tienen que viajar con su vehículo, por las carreteras, ya que la prudencia propia no basta, sino que hay, que encomendarse al Altísimo, cada vez que se pretende salir con la familia, o trasladarse de ciudad, no valla a ser, que se tenga la mala suerte, de tropezar en el camino, con un loco negligente y nos quite, o arruine la vida para siempre.

 

Por eso los gobernantes y legisladores de la nación, deben crear nuevas leyes que endurezcan las sanciones y penas, cuando se infrinja una norma de trafico por imprudencia temeraria, para que la sociedad gane en seguridad, disminuyendo la estadística luctuosa, de personas que han dejado su vida e ilusiones en el asfalto.

 

PUBLICADO EN LAS PROVINCIAS 05/10/2003